domingo, 19 de junio de 2016

¿El balón a nuestros pies o nosotros a los pies del balón?



Por Renato Zúñiga.
El fútbol es  apasionante. El ser humano tiende a ser infiel en todo el tipo de relaciones como son el matrimonio, la profesión y hasta en la religión. Pero cuando se trata de fútbol, no hay espacio para la infidelidad. El hincha de un club le seguirá siendo fiel aun cuando este lo traicione (con derrotas humillantes e inolvidables).
Así lo retrata Francisco Alcaide en el libro Fútbol: Fenómeno de Fenómenos, presentado el día Martes 7 de julio de 2009, “el fútbol para muchas personas, es una religión laica en la que los jugadores se convierten en dioses, los estadios se vuelven templos y los aficionados son feligreses”.
La preferencia por algún equipo llega a ser tan grande, que manipula el bolsillo, la relación con pares del equipo detractor y el estado de ánimo de la persona, lo que trae como consecuencia, dificultad en el núcleo familiar y  estabilidad laboral. Vicente Verdú (2009) plantea: “Si tu equipo gana, el lunes será menos lunes”, lo que se complementa con lo que escribe Julio Ramón Rybeiroen (2009): “Quien no conoce las tristezas deportivas no sabe nada de la tristeza”.
Gracias al apoyo incondicional del hincha, pasando por alto muchas veces las necesidades básicas, es que cada vez se le inyecta más dinero al fútbol. Tanto es así que variadas entidades financieras han puesto sus ojos en ligas de fútbol. Por ejemplo, la liga de fútbol profesional Chilena se llama actualmente Campeonato Scotiabank, de la misma manera, en España se llama Liga BBVA.
Lo interesante, y para muchos preocupante, ocurre cuando notamos que depender de un balón, significa desprenderse de bienes o destinar plata que no tienes, para pagar una entrada excesivamente cara u obtener algún tipo de merchandising, lo que no solamente afecta a nivel familiar, ciudad o país, sino, ¡MUNDIAL!
Para sintetizar, finalmente concluimos que el fútbol es mucho más que un simple deporte, que hay que tomar conciencia lo mucho que se entrega y hace depender una esfera, al maltratarse entre pares, pueblos hermanos, etc., al dejar las necesidades básicas por tu club o país de preferencia. Comparto la siguiente imagen, para que nos cuestionemos si como comunidad estamos haciendo lo correcto. 




Bibliografía.



  • ·         Libro Fútbol: Fenómeno de fenómenos, Francisco Alcaide, 2009.

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