Proyecto Costanera Center: ¿Impacto positivo o negativo?.

Gran expectación causó en la prensa y en el público la apertura del “Mall Costanera Center”, el más grande, moderno e innovador centro comercial de Sudamérica. ¿A qué se debió la importancia de esta inauguración?, ¿fue solo publicidad o realmente este gran proyecto llego a impactar a los santiaguinos que día a día pasan frente a la monumental torre?.

El Mall Costanera Center pertenece al Proyecto Inmobiliario Costanera Center, proyecto que considera la construcción de cuatro torres además del mencionado Mall. Dentro del proyecto se encuentra la torre más alta de Sudamérica con 62 pisos, su construcción destaca por su alto grado de sustentabilidad y eficiencia.

El proyecto inmobiliario alberga hoteles de 4 y 5 estrellas, centro de convenciones, supermercados, oficinas, tiendas de retail y comercio en general. El Mall específicamente consta con más de 300 tiendas, todas organizadas temáticamente en sus 6 pisos.

La inauguración del Mall se realizó el 12 de junio del 2012, ese mismo día cientos de personas acudían a recorrerlo, comprar o simplemente visitarlo para decir que estuvieron en el famoso Mall Costanera Center, así publicaciones en las redes sociales como “estoy en el costanera” se hicieron recurrentes durante los primeros días de su apertura al público.

Recorrer este Mall en su totalidad duraría horas, entrar a sus restaurants y recorrer todas sus tiendas, sin  duda es un panorama que muchos disfrutamos. Un lugar donde lo que buscas lo encuentras y que muchos lo hacen parte habitual de sus salidas. Son conocidos sus altos precios, pero al público que está dirigido es  seleccionado, un consumidor que aprecia y tiene los medios para poder visitar y comprar en las nuevas tiendas, algunas de estas que por primera vez están en nuestro país, lo que lo hace aún más atractivo para sus visitantes.

Este gran proyecto se encuentra en el centro financiero y comercial de la capital de Chile, ubicado estratégicamente cercano a  las comunas con mayor ingreso en Santiago, como lo son Providencia, Las Condes, Vitacura y La Reina.

El acceso a este nuevo centro de negocios ha generado un aumento progresivo de la cantidad de personas que concurren a este, ya sea en transporte público o privado. Están los trabajadores, comercio y los nuevos visitantes de la zona, lo que ha provocado un consecutivo colapso de infraestructura vial. Esto se puede apreciar a diario en las calles cercanas al centro comercial, o en la Estación Tobalaba del metro de Santiago la más cercana a este Mall, la cual en las horas con mayor afluencia de público, se ve sobrepasada su capacidad.

Junto con el proyecto se construyeron obras de mitigación, pasos bajo nivel, puentes y pasarelas, a demás de una reprogramación de los semáforos, obras que según la empresa, han sido satisfactorias alrededor del Mall, pero para las personas que transitan por lugares cercanos a esta construcción no han sido  tan gratificantes, ya que el problema de congestión se trasladó a las calles cercanas.

 Por otro lado tenemos los habitantes de la zona donde se construyen las torres, los cuales antes de su construcción ya se veían afectados por la cantidad de personas que llegaban a trabajar y ahora esta se vio incrementada, por lo que la calidad de vida para ellos ha sido afectada, no es el mismo lugar que ellos habitaron años atrás y menos aún tienen la misma vista, ya que los altos edificios tapan la visual y han disminuido la luminosidad natural.

Entonces, por qué no decir que el “Centro Costanera Center” ha impactado a los santiaguinos, principalmente a los que habitualmente concurren a sus alrededores. -Un impacto positivo genera la cantidad de nuevos visitantes y turistas tanto de Chile como de otros países que llegan a conocer el edificio más grande de Sudamérica. También se puede mencionar las nuevas tiendas que han llegado a nuestro país y el mayor espacio que genera para las empresas con las nuevas oficinas, estos entre otros beneficios.

Pero también tenemos el impacto negativo, este que afecta al comercio cercano, al transporte, al tránsito tanto vehicular como peatonal y sobretodo el impacto visual que genera su construcción, su poca armonía con el entorno y su aprovechamiento excesivo de los metros cuadrados construidos por sobre lo que parece razonablemente arquitectónico dentro del entorno.

Todo proyecto lleva consigo un impacto positivo y negativo, pero es de esperar que los beneficios sean más que los problemas que genere. Por ahora, se puede seguir visitando el lugar, sin mayores complicaciones y aceptando la mayor afluencia de personas en los alrededores. Pero ¿qué pasará cuando se inaugure todo el Centro Costanera Center?, es ahora cuando se deben hacer estas preguntas para prever posibles conflictos, y no esperar que el ya sobrecargado lugar provoque un colapso general del nuevo centro comercial y financiero de la capital.

Claudia Norambuena Villalobos
Ingeniería Civil en Obras Civiles

Universidad de Santiago de Chile