Al revisar una de esas tantas películas, nos
detendremos en una que goza de tener una buena estructura dramática, apreciada
por el buen uso de recursos narrativos (personajes, lugares, acontecimientos) y
un muy buen desarrollo de la trama, un film de Jean-Pierre Jeunet, 'Amélie' (Le
fabuleux destin d'Amélie Poulain).
Desde
el comienzo de esta maravillosa producción se va presentando al espectador, por
medio de una voz en off, a los distintos personajes que integran la trama. Se
habla de sus oficios y gustos, y de cómo influyen en la bizarra vida de la
protagonista. Luego viene la presentación de la trama, que relata la necesidad
de la protagonista, provocada por una casualidad, de dedicar su vida a ayudar a
los demás. Después de varios exitosos intentos de ayuda es cuando se presenta
un giro en la trama, al manifestarse en la protagonista la sensación de estar
dejándose a un lado a si misma y de no poder lograr su propia felicidad. Aquí
es cuando la narración utiliza un nuevo recurso en la historia, refiriéndose al
amor que Amélie siente por un chico, convirtiéndose en un nuevo episodio que
comienza a dar forma a lo que sería el final de la historia.
Durante
toda la película se hacen evidentes los recursos dramáticos, sosteniendo un
buen argumento, y la correcta combinación de dichos recursos. Los personajes
constan de una biografía, la trama se presenta de manera clara, hay una ilación
entre varios episodios e incidentes necesarios para un buen desarrollo
narrativo; todo siendo correctamente usado para contextualizar un buen guión.
Por
otro lado, la propuesta artística de la película goza de una particularidad
magnífica, que ha influido en varias producciones posteriores. Se nota una
clara influencia del arte pictórico francés reflejado en el vestuario,
ambientación, locaciones, etc. Además, Amélie cuenta con una musicalización
emocionante y maravillosa, que sin duda ha llegado a ser una de las más
recordadas y originales de la historia del cine.
Una
historia maravillosa, fresca, divertida, original y emocionante es lo que nos
cuenta Jeunet en su película, que se ha posicionado como una de las más
importantes y trascendentales del cine francés.
Natalie A. Muñoz Lepe
Ingeniería Civil Industrial
Universidad de Santiago de Chile
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