La educación es un tema que
cada vez está más en la palestra, desde la gratuidad hasta las condiciones
laborales de los docentes, pero hay un aspecto que no siempre se menciona o
discute: el rol de los padres, pues finalmente ¿Quiénes son los principales
responsables de la educación? Muchas veces cuando hablamos de educación se
alude a ella como solo aquello que tiene que ver con profesores y escuelas
olvidándonos del rol de los padres, quienes cumplen un papel fundamental en la
educación de sus hijos. Son los padres quienes están en primer contacto con sus
hijos, ellos viven el día a día, son ellos quienes tienen las mejores
condiciones para dar el pie a una buena educación, principalmente por su cariño
desinteresado, pudiendo así conseguir el crecimiento en la autonomía de sus
hijos y, por consiguiente la madurez.
Es por lo anterior que los
padres son el pilar fundamental de la educación y los principales formadores de
sus hijos, con ellos están desde su primer día de vida, por ello se transforma
en un elemento primordial la presencia de valores, reglas, responsabilidades,
deberes y derechos que deben entregar a sus hijos en casa, pues a partir de
aquello los niños podrán desarrollar sus comportamientos posteriores, si no se
transmite desde pequeños a los niños que hay normas y responsabilidades que
cumplir durante la vida para poder desenvolverse y lograr distintas metas la
labor del docente y de los establecimientos educaciones complica mucho, ya que
finalmente estas actitudes ausentes se transforma, en la mayoría de los casos,
en la piedra de tope para la educación formal, sin hábitos ni métodos guiar el
aprendizaje de un niño o adolescente no resulta efectivo. Es así que sin duda
los padres tienen una gran responsabilidad en sentar las bases para que sus
hijos se desarrollen en el mundo, fuera de la casa, lejos de la protección que
ellos les pueden brindar.
Bien se sabe que la relación
que existe en el grupo familiar es única, reflejando así la importancia que tienen
los padres en el proceso educativo, solo
en la familia se pueden dar tres relaciones insuperables, y que están
completamente vinculadas entre sí, aunque son diferentes, como: la filiación,
consanguinidad y alianza (Santelices, 2001),
demostrándose así que los lazos formados en la familia son únicos, y por ello
el aporte que hacen los padres en la educación es fundamental, existe una
vinculación innata que finalmente desarrollará en los hijos bases éticas,
morales, y valóricas para su posterior educación formal (colegios, institutos,
universidades), ya que si bien la educación que reciben en la casa está en
directa relación con la que recibirá en establecimientos educacionales,
establecimientos que los padres escogerán de acuerdo a sus principios y a la
formación que quieren que sigan sus hijos, demostrándose esto en la permanente
búsqueda de la mejor educación para sus hijos, y esto en nuestro país significa
poder matricular sus hijos en colegios particulares o en su defecto particular
subvencionado, ya que en todas las mediciones existentes en la educación como
lo es el SIMCE o PSU los resultados están directamente relacionados con el
nivel socioeconómico del colegio, presentándose una constante en cuanto a los
resultados de aprendizajes de los estudiantes, aspecto que demuestra el por qué
los padres escogen o prefieren colegios particulares en vez de establecimientos
municipales, según datos recogidos por la encuesta CEP (Centro de Estudios Públicos, 1987) realizada entre Junio y Julio del
año 2011 a toda la población en base al
Censo de 2002 , arrojando que un 70% de la población preferiría un colegio
subvencionado o particular y solo un 24% escogería un liceo municipal, a pesar
de que ambos establecimientos presenten igual costo de matrícula y estén aproximadamente a igual distancia, las
percepciones de la educación municipal no han variado y finalmente cada padre
entrega a sus hijos las herramientas que les sean posibles y que consideren
mejores para sus hijos.
Es
por lo anterior que se afirma que los padres son los primeros educadores de sus
hijos, por ello no se debe dejar estar tarea solo en las manos del gobierno o
los educadores, si bien ambos son actores importantes en el desarrollo de ésta
también resulta fundamental la participación de los padres. Es decir, para que
la educación sea efectiva y logre los resultados esperados es de suma
importancia que los actores involucrados (niños, padres, educadores y colegios)
trabajen para un mismo objetivo y bajo un mismo fin: educar.
Las bases
que entrega la familia y la educación formal, son las que entregan un marco de
desarrollo durante la vida, de esta manera es que debe existir una gran
coordinación entre escuela y familia esta es la única forma en que se logre un
verdadera formación de las generaciones posteriores, y para lograr aquello es
fundamental que las familias, y padres en particular, deben estar lo
suficientemente comprometidos con la educación que tienen sus hijos y
participar activamente en ella, pues es la única manera que ambos agentes
educativos estén vinculados y conectados para impartir los mismos valores
éticos y morales en los niños, tiene y debe existir una coherencia entre lo que
los estudiantes conocen y aprenden en relación a los valores en el colegio, más
que conocimiento o lo intelectuales que pueden llegar a ser, como con los valores que se le entregan en el
hogar, considerando con ello que los padres eligen un colegio para sus hijos
según la visión y misión que presenta el establecimiento, equiparándolo con la
calidad que éste les pueda entregar.
Por lo anteriormente
planteado, es que se puede confirmar que la educación entregada por los padres
es clave para todo lo que recibirán los niños a lo largo de la vida, si la
familia no cumple su rol educativo, no puede pretender que los colegios y
particularmente los docentes inculquen valores y normas de comportamiento a
niños que no las han tenido antes, ya que ninguno de los actores educativos
puede trabajar sin el apoyo del otro. Son los padres que con las prácticas de
crianza pretenden modular y encauzar las conductas de los hijos en la dirección
que ellos valoran y desean y de acuerdo a su personalidad, es decir, lo que
ellos ya han formado lo dejan en manos de establecimientos educacionales con
perfiles que se asemejen a lo que ellos buscan que sus hijos sean, por tanto la
educación que se le entregue a los niños está compuesta por lo que entrega y es
la familia en sí, añadiendo a ello los aportes que realiza la educación formal
(colegios y docentes).
Es
importante comenzar a concluir con el hecho de que los padres son quienes
educan en valores y actitudes, los hijos aprenden de lo que ven en la casa, de
las acciones que tienen sus padres para con ellos y con toda la familia, los niños
aprenden desde el ejemplo. Observando,
imitando y conociendo su entorno es que los niños construyen sus
aprendizajes y forman su carácter, finalmente es eso lo que llega a las salas
de clases, personas ya formadas, con valores y actitudes que vienen desde sus
hogares, por esto el rol de los padres es esencial en la formación de las
futuras generaciones.
Los padres, la familia, los
colegios y los profesores son fundamentales en el proceso de formación de los
niños, todos ellos son actores claves en la educación de cada niño. Por esto claro
está que la tarea educativa no recae en un solo actor, el profesor, sino que
involucra a más personas como lo son la familia, y principalmente los padres.
Finalmente hablar sobre
educación siempre será un tema de discusión, en el que se expondrán diferentes
puntos de vistas y en el cual todos los actores defenderán sus posturas, pero
más allá de eso lo que realmente importa es la calidad que se entregue en ésta
y el trabajo que se pueda realizar para mejorarla y lograr aprendizajes claves.
La educación debe y puede tener frutos muy provechosos pero para ello es
necesario tener objetivos y metas claras además de actores educativos que sean
partícipes comprometidos con ella, de esta forma se podrá hablar de calidad
educativa, así se podrá tener una educación que cumpla con las expectativas y
que forme a las futuras generaciones de manera integral, es necesario el
compromiso y el trabajo permanente para tener la tan anhelada educación de
calidad en Chile.
Luis Astorga González.
Ingeniería civil Metalurgia.
Universidad de Santiago de Chile.
Luis Astorga González.
Ingeniería civil Metalurgia.
Universidad de Santiago de Chile.